sábado, 16 de marzo de 2013

LA PRESBICIA: SÍNTOMA DE ENVEJECIMIENTO.





Las gafas: la salvación.

La prebicia es nuestro síntoma de envejecimiento para los que no hemos padecido desde la infancia o la juventud ningún trastorno de la visión en la agudeza visual o en la campimétrica (por ejemplo la retinosis pigmentaria, que te reduce el campo visual progresivamente hasta la visión en "cañón de escopeta")
  Yo, que siempre gocé de una vista privilegiada (lo normal es una agudeza visual de 10/10 o sea 1, la mía era de 11/10), ahora no soy capaz de leer una página de un periódico, a no ser a plena luz del día y con dificultad: presbicia propia del envejecimiento, que asumo.
  Fue tristemente divertido comprobar cómo mi visión se iba deteriorando poco a poco: Unos buenos prismáticos con ocular regulable me alertaron de lo que estaba pasando. los prismáticos, al hombro en las caminatas por el monte, se desajustaban en el ocular móvil y yo lo percibía al mirar, regulando el ocular hasta la percepción clara y la posterior comprobación de que el ocular estaba en la raya central. Después todo cambió y tenía que ajustar el ocular para ver bien. Tras unos años ya no ajusto el ocular, simplemente utilizo gafas de lectura porque ya no puedo ver de cerca. Cegarato cercano y esclavo de las gafas de lectura, pero dando gracias a la vida por haber tenido una visión prilegiada y  por seguir viendo muy bien con gafas, a pesar del aviso de vejez.

 Afortunadamente no soy ciego aún,  aunque la peor ceguera sería la de la mente: la mayor discapacidad que puede sufrir una persona y... ¡Antes muerto!